La vicepresidenta demócrata Kamala Harris y el expresidente republicano Donald Trump protagonizaron un álgido cruce de espadas con ofensas personales incluidas y argumentos radicales en temas de política exterior, en el primer debate televisivo entre ambos de cara a las venideras elecciones.

Uno de los momentos más polémicos fue cuando Trump, abanderado republicano para los comicios del 5 de noviembre, se refirió a inmigrantes en la ciudad de Springfield, en Ohio, donde, según él, “comen perros y gatos”, un argumento desmentido por David Muir, uno de los moderadores del debate.

En el tema de los derechos reproductivos, ambos intercambiaron acusaciones mutuas de mentir, aunque la candidata demócrata le cuestionó a Trump si vetaría una legislación para prohibir el aborto en todo el país.

La moderadora Linsey Davis debió desmentir afirmaciones del exmandatario sobre supuestas ejecuciones de bebés después del parto.

Aunque enfrenta varios procesos judiciales en su contra, Trump negó su responsabilidad en el asalto al Capitolio en enero de 2021, al afirmar que a él solo se le pidió dar un discurso, y culpó de esos hechos a Nancy Pelosi, entonces presidenta de la Cámara de Representantes.

Temas de política exterior

Trump acusó a la administración del presidente Joe Biden del fracaso de la operación de retirada de tropas en Afganistán de mayo a agosto de 2021, mientras que Harris recordó que los acuerdos fueron pactados durante la estancia en la Casa Blanca del ahora candidato republicano.

La vicemandataria y candidata presidencial demócrata, en tanto, denunció que su rival en los venideros comicios invitó a Camp David a representantes de una agrupación que calificó de terrorista como el movimiento de resistencia del Talibán, algo que, dijo, nunca debió ocurrir.

En el debate, en el cual los moderadores mantenían apagado el micrófono del adversario que esperaba los argumentos de su oponente, generó una fuerte polémica el tema del conflicto en Ucrania.

Harris confirmó que Estados Unidos mantiene su firme compromiso de rearmar a Kiev en su confrontación con Rusia, cuyo presidente, Vladimir Putin, ordenó una operación bélica para proteger a la población sublevada del Donbás, así como para desmilitarizar y desnazificar a Ucrania.

Al finalizar el debate, la vicepresidenta argumentó que los electores pudieron observar en el intercambio quién se concentra en pensar en el futuro y quién se aferra al pasado, en clara alusión a su contrincante.