El secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, entregó este martes 25 de marzo la certificación al Taruk, el primer autobús eléctrico fabricado completamente en esta nación norteamericana.

La Jornada reseña que en la manufactura del vehículo participaron las empresas mexicanas Megaflux y Dina, con apoyo del estatal Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México.

“El objetivo es aumentar nuestras capacidades de innovación y que se traduzca en bienestar para la población. Es un gran logro, todos los países del mundo lo hacen, ahora nosotros también”, enfatizó Ebrard, citado por el medio mexicano.

El ministro detalló que las primeras unidades prestarán servicio en Ensenada, Baja California (norte), al tiempo que informó que cada Taruk puede transportar a 60 pasajeros.

Ebrard resaltó que esta certificación cobra un importante significado, a propósito de los aranceles de 25 % impuesto por el gobierno de Estados Unidos que entrarán en vigor el 2 de abril.

Mañana me voy a Washington de nuevo, porque estamos en el tema complejo de cuál va a ser el futuro del acomodo no político, sino económico con los Estados Unidos. México exporta más de un millón de vehículos a los Estados Unidos y hoy la discusión es qué futuro va a tener ese modelo. Es decir, México ha tenido éxito, somos un país que no exportaba vehículos y hoy somos el sexto exportador mundial creciendo y si ven ustedes autopartes, todavía más

El Taruk tributa a las metas del Plan México presentado en enero por la presidenta Claudia Sheinbaum, que estipula el incremento de fabricación nacional de insumos.

El objetivo, dijo Ebrard, es aumentar las capacidades del país, desarrollar una mayor innovación, e implementación, y que eso se traduzca en bienestar para la población.

Lleva meses de pruebas, de ajustes, de ensayo-error, de mejorar su desempeño, el número de kilómetros de autonomía, de aumentar su eficiencia frente a cualquier otro vehículo eléctrico de Asia o de cualquier otra región del mundo. Y es mejor el mexicano. No se trata de apoyar desarrollos mexicanos, solamente, sino que sean eficientes y puedan tener viabilidad económica

Desde su llegada a la Casa Blanca, el presidente Donald Trump ha insistido en imponer aranceles a México y a Canadá. Según el magnate, ambas naciones no contribuyen a la lucha contra el tráfico de fentanilo, una sustancia que encuentra alta demanda en la población estadounidense ante la inacción de las autoridades de ese país.