Con la publicación el 25 de marzo en el Registro Federal de un decreto del presidente Donald Trump para derogar el llamado parole humanitario, muchos de los 531.690 beneficiados por ese programa, provenientes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela (CHNV), quedarán en un limbo legal en Estados Unidos.

Durante su campaña presidencial, el republicano situó a la deportación de foráneos con situación jurídica irregular como objetivo crucial de su administración, al tiempo que forzó el tema dentro del proselitismo electoral en la puja por la Casa Blanca, en 2024.

La presión fue tal que el presidente Joe Biden, quien en octubre de 2022 puso en vigor el referido programa para regular la llegada de venezolanos -y luego lo extendió a las otras tres naciones-, debió frenar la aprobación de peticiones.

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Explicaciones poco creíbles

Sin ánimo de determinar si fue una medida correcta o errónea, analistas estadounidenses consideran que los argumentos ofrecidos por el equipo de Trump no son, precisamente, de los más creíbles.

De hecho, la práctica de favorecer a un grupo nacional ya se dio en otros tiempos en Estados Unidos, incluido durante la invasión norteamericana en Vietnam, cuando la llegada de ciudadanos de ese país estuvo blindada ante la posibilidad de una deportación.

En el caso del parole, concedía dos años de protección para el recién llegado con origen de CHNV, incluido un permiso laboral temporal y la posibilidad de prorrogar ese estatus.

Tal oportunidad cesa ahora, cuando se activa un mes de conteo regresivo que concluye el 25 de abril.

La administración Trump afirma que la medida de Biden para aligerar la situación en la frontera y darle un viso legal a la entrada de ciudadanos de esos países a Estados Unidos, no ayudó en nada y ahora no es necesaria.

Sin embargo, el propio Departamento de Seguridad Nacional debió reconocer que se redujo la migración irregular procedente de los cuatro países mencionados.

En 2022, cuando se puso en vigor el parole, las personas detenidas en la frontera de esas naciones llegaban a los 600.000, mientras que en 2024 la cifra bajó a 183.000.

La incertidumbre enriquece a abogados

En estos momentos, hay 210.000 haitianos, 117.000 venezolanos, 110.000 cubanos y 93.000 nicaragüenses que esperan con incertidumbre qué podría pasar con ellos, afirman medios de prensa estadounidenses.

#Video | ❓🤔 Sabías que los abogados de inmigración no se dan abasto con la gran cantidad de solicitudes y llamadas de los migrantes, que víctimas del nerviosismo desean apresurar trámites para protegerse de las amenazas de Donald Trump.

💭Te compartimos los detalles en este… pic.twitter.com/kqH4iq8Jvh
— Alma Plus Tv (@almaplustv) December 19, 2024

La televisora británica BBC destaca que la disposición de Trump afectaría, sobre todo, a quienes ingresaron con el permiso de estatus temporal directo desde sus países y aún no lograron tener otro respaldo legal como la residencia (Green Card).

Por lo pronto, las canales de televisión en la Florida, donde se concentran quienes recibieron el parole, apenas pueden aconsejar el pago de abogados para consultar qué se puede hacer en cada caso específico.

Los retos de una deportación masiva

Desde que el 22 de enero Trump puso en vigor disposiciones para expulsar a decenas de miles de foráneos, pero ese proceso enfrentó serios retos en el plano legal, incluidos los que están en contra de la deportación de menores nacidos en Estados Unidos.

Además, el empleo de aviones militares, cadenas y esposas para trasladar a los foráneos fuera de territorio norteamericano condicionaron una lluvia de reclamaciones en tribunales de varios estados de la unión.

La decisión del equipo de Trump de secuestrar a ciudadanos venezolanos, al acusarlos de pertenecer a un grupo del crimen organizado, sin juicio ni presentación de pruebas, encontró rechazo de varios países y entre los letrados norteamericanos.

Trump viola la justicia y deporta cientos de venezolanos a El Salvador https://t.co/aPDhBHHO6R pic.twitter.com/coXEbUnTyP
— Alma Plus Tv (@almaplustv) March 17, 2025

¿Acaso la Casa Blanca también afectará a los ucranianos?

Con el conflicto ucraniano en pleno apogeo, la administración del demócrata Biden permitió el ingreso de 240.000 ciudadanos de la república exsoviética, una cifra mucho menor a los casi siete millones aceptados en su momento por países europeos.

Pero Trump parece ahora dejar de lado el papel de padrino bélico y político de Kiev para forzar un cese de hostilidades con Moscú.

Como antecedente, el jefe de la Casa Blanca podría echar un vistazo a sus socios europeos que, aunque apoyan militarmente a Kiev, ya empezaron a derogar facilidades ofrecidas en su momento a los migrantes ucranianos.

De cualquier forma, la derogación del parole se enmarca dentro de la política de intolerancia migratoria impulsada por Trump, con intentos de criminalizarla, algo que muchas organizaciones de defensa de derechos humanos se encargaron de denunciar.